Hábitos del uso de leña en Castro, Isla
de Chiloé
Eduardo
Neira
Socio Capitulo de los Ríos
Encargado de estudios AIFBN
eduardoneira@bosquenativo.cl
Raúl Bertin
Socio Capitulo Chiloé AIFBN
raulbertin@bosquenativo.cl
Resumen
Se
realizó un diagnóstico sobre los
hábitos de uso de la leña en la
ciudad de Castro, con el fin de caracterizar su
consumo y abastecimiento, que sirviera de base
para evaluar la importancia de la leña
como fuente de energía e identificar los
sectores de abastecimiento. La caracterización
se realizó considerando los estratos socioeconómicos.
De acuerdo a los resultados, el 94% de los hogares
de Castro utiliza leña como principal fuente
de energía (principalmente calefacción).
El consumo anual de leña en la ciudad es
de 129.104 m3/año. Los principales sectores
abastecedores son Butalcura, Quemchi y Huillinco.
Del total de leña consumida, las especies
más utilizadas son luma (Amomyrtus luma)
con 41% y tepú (Tepualia stipularis) con
27%. Sin embargo, se aprecia un aumento de la
participación de la Mezcla respecto a estudios
anteriores. La importancia económica del
mercado de la leña en Castro tiene una
magnitud de ventas que supera los 4,2 millones
de dólares, siendo un mercado muy atractivo.
Sin embargo, es un negocio informal, ya que sólo
el 16% de los hogares encuestados señala
comprar leña a un comerciante con un negocio
legal; y el 95% de hogares encuestados indica
no recibir boleta por su compra. Para asegurar
la compra de un buen producto, el 60% de los consumidores
señala estar dispuesto a comprar leña
certificada, debido a que mejoraría la
calidad de la leña y habría más
control sobre el producto (por ejemplo el origen);
ya que, de acuerdo a la información disponible,
más del 88% del volumen de leña
consumida en esta ciudad provendría de
extracción ilegal.
|
1. Introducción
La utilización de combustibles renovables como
la madera adquiere gran relevancia, pues un balance positivo
entre crecimiento de las masas boscosas (absorción
de CO2) y quema de leña o desechos de madera (emisión
de CO2), es una de las vías para contrarrestar
el efecto invernadero, y por ende, el calentamiento global
(Reyes, Frêne 2007).
En el archipiélago de Chiloé, su uso se
remonta a épocas prehistóricas. Desde finales
de la era glacial (alrededor del 6000 a. p), los habitantes
de la Isla de Chiloé han logrado desenvolverse
en condiciones climáticas adversas, en gran medida
gracias al bosque nativo, el cual les ha otorgado una
multiplicidad de bienes y servicios, dentro de los cuales
trasciende la leña como fuente de energía.
En Chiloé, sólo en los últimos años,
se ha revelado el valor socioeconómico de la leña.
La gran importancia que tiene este recurso como fuente
de energía en las ciudades del centro sur y sur
de Chile, y su impacto sobre las masas boscosas nativas
del país, hizo que en abril del año 2007
se comenzara a implementar el Sistema Nacional de Certificación
de Leña en la ciudad de Castro, a partir del Proyecto
“Leña, Energía Renovable para la Conservación
de los Bosque Nativos del Sur de Chile”. Una de
las primeras actividades realizadas fue la recopilación
y actualización de los antecedentes del mercado
de la Leña de la ciudad, utilizando como referencia
estudios anteriores que permitirían dar cuenta
de la situación actual sobre el consumo de este
combustible.
A continuación se presenta un trabajo cuyo objetivo
fue diagnosticar y caracterizar el consumo de leña
por los habitantes de Castro, con la finalidad de generar
una línea base que permita evaluar el efecto de
la implementación del Proyecto Leña. Se
presenta la descripción, de manera cuantitativa,
de los hábitos y costumbres en la utilización
de este combustible por parte de los habitantes de la
ciudad de Castro.
2.
Metodología
Entre septiembre y noviembre del año 2007 se
realizó una encuesta, correspondiente al 3,4%
de los hogares de la ciudad de Castro, es decir, 256
encuestas realizadas en poblaciones y villas de los
estratos socioeconómicos agrupados en: alto (ABC1),
medio (C2 y C3) y bajo (D y E), cuya distribución
corresponde al 0,1%, 80,8% y 19,1% respectivamente (INE,
2002). El Cuadro 1 muestra el número de encuestas
por estrato. La distribución espacial de cada
grupo fue definida en terreno, a través de un
recorrido por ciudad.
La encuesta aplicada estuvo conformada por 45 preguntas
relacionadas con: producción de leña,
impacto socioeconómico de la producción
de leña, uso eficiente y responsable de leña,
abastecimiento, consumo de leña y mantención
y limpieza de equipos.
3.
Resultados
3.1 Uso de leña en la ciudad de Castro
Se determinó que el 94% de los hogares
de Castro (7.020) utiliza leña, principalmente
para calefacción, indicando que es un buen combustible
debido a su alto poder calorífico. Comparada
con otros combustibles, los encuestados señalan
que es el más barato, seguido de parafina, mientras
que los combustibles más caros son la electricidad
y el gas. Sin embargo, califican el precio de la leña
como alto a muy alto (91%). Respecto a los 448 hogares
que no utilizan leña, más de la mitad
de ellos están dispuestos a cambiarse a leña.
La información obtenida en esta encuesta respecto
al uso de leña como principal combustible de
la ciudad de Castro, es levemente inferior a lo registrado
para el año 2003 por Sigmund (2004), quién
señaló que el 97% de los hogares utilizan
leña como combustible.
3.2
Origen de la leña
De acuerdo a la información recopilada, las personas
encargadas de la compra de este producto son principalmente
dueñas de casa (41,9%) o los jefes de hogar (37,9%).
El origen de la leña nos permite conocer las
zonas abastecedoras, así como también
la localización de los bosques con mayor presión.
En Castro sólo el 32% de los encuestados señala
conocer el origen de la leña que compra. De la
información generada, se puede desprender que
el 83% de los encuestados del estrato alto no sabe de
dónde proviene su leña. El estrato medio
y bajo no sabe en el 68 % y el 66 % respectivamente.
Esto coincide con Siemund (2004) quien comentó
que la mayoría de los consumidores no sabía
de qué sector proviene su leña.
Los encuestados reconocen como principales sectores
abastecedores a Butalcura, Quemchi y Huillinco, información
que coincide en parte con lo informado por intermediarios
y dueños de camión de Castro. El Cuadro
2 muestra la participación de cada sector en
el abastecimiento de leña para Castro y la Figura
1 muestra la ubicación general de dichos sectores.
Figura 1. Sectores abastecedores de Leña para
la ciudad de Castro.
De acuerdo a Marabolí (2007) los principales
sectores productores para la comuna de Castro son San
Pedro y Llicaldad. El siguiente cuadro muestra los principales
sectores para todas las comunas de la Isla de Chiloé.
3.3 Especies utilizadas y precio
Los encuestados mencionan conocer 27 especies que son
utilizadas como leña; 24 corresponden a especies
nativas (90,9%), y solamente 3 especies son exóticas
(álamo, eucalipto y pino). Esto coincide con
la tendencia regional, ya que según Ábalos
(1997) el 92,5% de las especies utilizadas como leña
en la X región corresponden a especies nativas:
ulmo (Eucryphia cordifolia), luma (A. luma),
tepa (Laurelipsis philippiana), coigüe
(Nothofagus nitida) y tepú (T. stipularis).
En Castro, el 80% de los encuestados se menciona luma,
tepú y ulmo, como especies con buena reputación
para leña.
De las especies mencionas, luma y tepú son consideradas
la mejor leña (62,7% y 19% respectivamente),
debido a su calor y mayor rendimiento (mayor duración
de la combustión), argumentación común
en todos los estratos socioeconómicos.
Sin embargo, un factor importante en la compra de leña
es el precio, que se relaciona con la calidad y formato
de venta. En Castro la leña se vende en tres
formatos: picada, metro trozado y metro sin trozar.
El siguiente cuadro muestra los precios según
especie, tipo de leña y formato más ultilizados
en Castro.
Las principales especies consumidas en la ciudad de
Castro son luma, tepú y mezcla o tripulada (corresponde
a una mezcla de especies del Tipo Forestal Siempreverde).
El Cuadro 5 muestra el consumo de leña por especie
o tipo de leña según estrato socioeconómico.
El 68,6% de la leña consumida en Castro corresponde
a las especies luma y tepú. La baja proporción
de ulmo (6%), se debe a la baja oferta de esta especie
en la ciudad de Castro, debido a que es mayormente comercializada
en Ancud. El segundo tipo de leña más
consumida es mezcla o tripulada con 23,5%. Llama la
atención la aparición de canelo (Drymis
winteri) como especie identificable para leña,
incluso con altos precios de venta (probablemente por
demanda estacional), ya que anteriormente formaba parte
de la mezcla o leña tripulada.
El
análisis por estrato socioeconómico, muestra
que la especie más consumida por el estrato alto
es tepú; luma en el estrato medio y mezcla o
tripulada en el estrato bajo.
3.4 Forma de compra o de abastecimiento
De acuerdo a Sigmund (2004), en Castro la compra de
leña a camiones repartidores era la de mayor
frecuencia; de hecho este estudio revela que en cerca
del 80% de los hogares se consigue su leña de
esta manera. El restante 20% se distribuye entre las
otras opciones de abastecimiento como: del propio predio,
de una leñería, de un productor rural
o del predio de un conocido o pariente.
La forma de abastecimiento varía de acuerdo a
la escala socioeconómica. A medida que descendemos
en la escala socioeconómica, aumenta la participación
de los camiones que comercializan leña: 50, 70
y 87 % (alto, medio, bajo), lo que se verifica en la
Figura 2. Lo contrario ocurre con el abastecimiento
directo y el suministro a través de locales de
venta (picadurías).
3.5 Época de abastecimiento y almacenamiento
de leña
Alrededor de la mitad de los hogares encuestados de
Castro se abastece de leña en verano (48%), mientras
que un 32% lo hace en invierno, época de mayor
requerimiento, con un mayor precio (ver Figura 3). El
siguiente cuadro muestra la distribución estacional
de compra de acuerdo al estrato socioeconómico.
El Cuadro 6 muestra una tendencia clara del estrato
alto por abastecerse tempranamente (verano y otoño),
lo que está relacionado con su mayor poder adquisitivo,
a diferencia de los estratos de menor poder adquisitivo,
que parcializan su compra durante el año.
La información presentada coincide con lo señalado
por Siemund (2004), que indicó que sólo
el 11% compra su leña una vez al año.
3.6 Gasto y volumen utilizado
Se determinó que el monto promedio gastado en
la compra de leña al año es de $301.914,
que corresponde a un consumo promedio de 18,4 m3 /año
de leña, cifra idéntica a la registrada
por Siemund, (2004). El Cuadro 7 muestra el gasto y
el consumo anual promedio según estrato socioeconómico.
Los estratos medio y bajo tienen el mayor consumo, que
se explica porque la leña no sólo es utilizada
para calefacción sino también para cocinar
y/o secar la ropa, lo que necesariamente obliga a mantener
funcionando los equipos durante gran parte del día
(además de lo señalado, la mayor parte
de las viviendas presenta mal aislamiento y utilización
de equipos de combustión poco eficientes). El
estrato medio es el segmento de mayor gasto debido a
que prefiere leña considerada de mejor calidad.
La importancia económica del mercado de la leña
se revela con el volumen de consumo y magnitud de ventas,
que supera los 4,2 millones de dólares para un
consumo de 129.104,1 m3 de leña, volumen que
habría experimentado una leve disminución
respecto a lo indicado por Siemund (2004), que registró
un volumen de 133.553 m3 de leña, explicado por
la disminución de la proporción de hogares
que consumen leña.
3.7 Leña Seca.
Respecto a la humedad de la leña, las formas
utilizadas en el 80% de los casos para reconocer leña
seca son el peso y color.
Los principales problemas de consumir leña húmeda
o verde reconocidos por la población son mayor
contaminación y suciedad en los equipos de combustión,
lo que implica mayor necesidad de mantención,
menor calidad y dificultades en la combustión.
Sin embargo, a pesar de lo manifestado, sólo
el 10% de los hogares consume leña seca y la
mayor parte compra una mezcla de leña seca y
verde (44%). Casi un tercio de Castro está interesado
en comprar leña seca, sin embargo prácticamente
no existe oferta de este producto. Esto tiene directa
relación con la inexistencia de planes de secado
y la escasa cantidad de galpones destinados al acopio
de leña en la provincia de Chiloé, tanto
a nivel urbano como rural.
Para secar su leña los consumidores no indican
un método claro, aunque mayoritariamente la arruman
en leñera o bodega (34%).
3.8 Equipos utilizados
El tipo y antigüedad de los equipos de combustión
utilizados permiten determinar junto con la calidad
del producto y el aislamiento de la construcción,
la eficiencia energética. Prácticamente
los únicos equipos utilizados en Castro son cocina
a leña (65,5%) y combustión lenta (33,7%).
El análisis del tipo de equipos por estrato se
presenta en el siguiente Cuadro 8.
De acuerdo a Siemund (2004), en Castro más del
69% utilizaba sólo cocina a leña en los
hogares y 15% la utilizaba en conjunto con combustión
lenta.
Respecto a la antigüedad de los equipos, se observa
que el 81,8% de las cocinas a leña fueron fabricadas
en los últimos 10 años, y que el 28,3%
tiene una antigüedad no mayor a 5 años.
En relación con los equipos de combustión
lenta, el 71,4% fue fabricado en los últimos
5 años y prácticamente todos los equipos
tienen una antigüedad menor a 10 años (93,6%).
La mayor frecuencia de fabricación fue el año
2006.
La información levantada sugiere que los equipos
utilizados estarían funcionando en condiciones
adecuadas, lo que se ratifica a partir de las respuestas
de los encuestados, ya que el 87% señala que
los equipos utilizados son eficientes, fundamentado
por buena calefacción (27,8%) y buen funcionamiento
(14,7%). Por otro lado, los encuestados señalan
asegurar el buen funcionamiento de los equipos con mantenciones
(39,5%) y limpiezas mensuales o trimestrales (36,3%).
Aunque el 85% de ellos no cuenta con los manuales respectivos,
los encuestados indican que la limpieza la realiza un
especialista (75%), lo que se reflejaría en la
inspección ocular, ya que el estado del cañón
(interior y exterior) y estado del vidrio es bueno.
3.9 Horarios de Consumo
Más del 70% de los encuestados señala
consumir leña prácticamente todo el día
(desde las 8 de la mañana a las 12 de la noche).
Los horarios de mayor consumo son entre las 10 de la
mañana y 1 de la tarde; luego entre las 7 de
la tarde y 9 de la noche; periodos de mayor actividad
en los hogares, con labores de cocción de alimentos
y calefacción respectivamente.
3.10 Mercado de leña
La importancia del mercado de la leña queda de
manifiesto en las respuestas de los encuestados, ya
que el 68% de ellos considera que la venta de la leña
es un buen negocio, principalmente por su precio y alta
demanda, y reconoce, como se presenta en la Figura 6,
que el comerciante es el principal beneficiado del negocio
(61%) y en último termino el consumidor; aún
cuando sólo el 29% de los encuestados señala
saber quienes conforman la cadena de comercialización
de leña.
3.11 Informalidad en el mercado
Sólo el 16% de los encuestados señala
comprar leña a un comerciante con un negocio
legal; más aún, el 95% indica no recibir
boleta por su compra. La forma de adquisición
más habitual en Castro es la compra a camiones
que transitan por la ciudad (75%), los cuales presentan
un alto grado de informalidad ya que, en general, no
cuentan con los respectivos permisos para la comercialización
de leña (Guía de Transporte de Productos
Forestales Nativos y Guía de Despacho y/o Factura
del Servicio de Impuestos Internos).
El 9% señala traerla del campo y sólo
el 5% de los encuestados indica comprar su leña
en leñerías establecidas las cuales en
general están formalizadas. De acuerdo a Siemund
(2004), sólo el 4% de los consumidores exigía
algún documento al comprar leña (boleta,
factura, guía, etc.)
Es importante destacar que en Castro no existen picadurías
con patente municipal .
3.12 Manejo y Conservación de bosques
El 72% de los encuestados cree que la producción
de leña tiene efectos negativos sobre el bosque
nativo por deforestación, pérdida de biodiversidad
(flora y fauna) y sobreexplotación y mal manejo.
De acuerdo a la información disponible en la
provincia de Castro, existe muy baja superficie de bosque
nativo con Plan de Manejo (11 mil hectáreas aproximadamente),
lo que implica que más del 88% del volumen de
leña consumida en esta ciudad provendría
de extracción ilegal.
Si bien los consumidores de leña en Castro manifestaron
que perciben que el sistema clásico de producción
de leña (sin Plan de Manejo Forestal) ha significado
procesos de destrucción y deterioro importantes
en la isla de Chiloé, y que claramente es insostenible,
muy pocos (32%) conocen la procedencia de la leña
que consumen.
3.13 Certificación
Uno de los derechos del consumidor es que el producto
que está adquiriendo corresponda a lo que se
le está vendiendo y cumpla con condiciones de
calidad requeridas.
En la cuidad de Castro la mitad de los encuestados califica
la leña que compra como buena. Otro 49% indica
que la calidad es regular, principalmente aquellos que
consumen leña tripulada o mezcla, ya que este
tipo de leña se comercializa húmeda y
de esa manera no combustiona adecuadamente.
Por otra parte, la mitad de los encuestados no se cerciora
de que la leña que le venden corresponde a la
especie o tipo de leña y volumen que compró.
3.14 Leña Certificada
Para asegurar la compra de un buen producto, el 60%
de los consumidores señala estar dispuesto a
comprar leña certificada, debido a que mejoraría
la calidad de la leña, habría más
control sobre el producto y se regularía el precio.
Aquellos que manifiestan no estar dispuestos a comprar
leña certificada (40%), señalan como principal
razón el mayor precio del producto; otras razones
que se indican son que no importa si la leña
está seca o húmeda o bien, que la leña
certificada no se ajusta con la realidad de los habitantes
de Chiloé.
Aquellos que manifiestan estar dispuestos a comprar
leña certificada pagarían un mayor precio
por el metro de leña con el fin de asegurar un
producto de calidad y mejor servicio asociado. El Cuadro
9 muestra la disposición a efectuar un pago adicional,
por estrato socioeconómico.
Es
importante señalar que una encuesta no es capaz
de verificar si esta disposición realmente se
hará efectiva al momento de ofrecer un producto
que cumpla con las características antes señaladas.
Al momento de efectuar la encuesta no se contaba con
comerciantes certificados, y por lo tanto tampoco con
un producto garantizado en cuanto al cumplimiento de
las normativas legales, sustentabilidad en el uso del
bosque, calidad del producto y transparencia ante el
consumidor. Actualmente existe 1 comerciante certificado,
por lo que en el corto plazo se podrá verificar
el interés real de los consumidores.
Con el proceso de certificación de leña
que se esta iniciando, se podrán elaborar planes
de uso sostenible de uno de los recursos del bosque
nativo de mayor demanda.
4. Bibliografía
ÁBALOS, M. 1997. Estimación del Consumo
de Leña en las Regiones V, IX y X.
Memoria para optar al Título de Ingeniero Forestal,
Universidad de Chile. 107p.
MARABOLÍ,
F. 2007. Estudio para determinar la oferta de madera
con objetivos bioenergéticos en la Provincia
de Chiloé (Mesa Forestal Chiloé).
REYES, FRÊNE. 2007. Utilización de leña
como combustible en la ciudad de Valdivia. Revista Bosque
Nativo 39:10-17.
SIEMUND, K. 2004. El consumo, las costumbres y el abastecimiento
de leña en hogares y consumidores grandes en
la isla de Chiloé. Encuesta Leña Chiloé
2003-2004, CONAF-KFW-GTZ-DED. Página 26, informe
técnico Proyecto de la Conservación y
del Manejo Sustentable del Bosque Nativo.
Volver
al índice >>
Volúmenes
Publicados >>
Volver a inicio>>
|